LA RANA ANA
Pensaba la rana Ana
sentadita una mañana:
sentadita una mañana:
"Yo ya no quiero nadar,
lo que deseo es volar."
Y para esta ocasión
un árbol fue la solución.
- De a saltitos se subió.....
¡ De lo alto se tiró!-
¡Qué lástima fue así
como quebró su nariz!
-Ahora la tiene vendada,
llora un poco mientras nada.
Fin
Cansada de pasar frío
la trucha salió del río.
Quería agua caliente
para lavarse los dientes.
Por suerte halló un mercado
atendido por pescados,
Corrió y compró un calefón
que estaba en liquidación.
Hoy está perfumada,
calentita y bien bañada.
¡Miren si no habrá cambiado
que hasta su trucha a pintado!
fin
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